“Hoy manda la comunidad”, la industria audiovisual debe apostar por el contenido vertical
La industria vive una transformación acelerada.Lo que hace un año parecía lejano, hoy marca el debate en los mercados internacionales. Así lo resume Miguel Wiernes Angeluk, CEO de We Latam y VYCO, quien observa en MIP Cancún un cambio de paradigmas derivado de las nuevas formas de consumir contenido.
Wiernes hace una comparación clara respecto a la edición anterior:
“El año pasado, cuando vine, era mi primer mercado y hablaba de microdramas, de videos cortos, y no tuve la recepción esperada”.
Hoy el panorama es distinto. We Latam se ha consolidado como una de las productoras más activas en la creación de contenido para redes sociales y formatos verticales, un tipo de narrativa que actualmente marca la conversación dentro del ecosistema audiovisual.
Ese auge ha obligado a productores y distribuidores a repensar sus estrategias. Aunque muchas empresas ya están adaptándose, aún existe desconocimiento sobre aspectos clave, como la monetización.
Del pitch tradicional al entendimiento de la comunidad
“La industria está acostumbrada a decir: ‘Tengo este contenido, es increíble…’, pero eso ya no va a funcionar: ahora manda la comunidad”, afirma Wiernes.
El contenido corto y vertical —por su forma de consumo y distribución— exige pensar primero en la audiencia y en cómo interactúa.
Aun así, reconoce que todavía existe resistencia. Sin embargo, eso no detiene la transformación:
“La gente está donde está: YouTube, TikTok y redes. Hay que apostar por llevarles contenido a esos espacios”.
Retos para migrar a formatos verticales
Uno de los principales obstáculos, señala Wiernes, es la incertidumbre de “perder” el contenido al hacerlo circular en plataformas abiertas. Para él, esta percepción es incorrecta: actualmente existen herramientas robustas para proteger derechos y controlar la distribución.
“Muchos medios grandes no quieren ser ‘uno más’ en redes. No quieren perder la sensación de ser el gran medio”, explica. “Tienen marcas, inversores, estructuras gigantes que los frenan. La industria tradicional tiene todo para migrar —calidad técnica, recursos, presupuesto— y aun así no se animan”.
Un mercado que debe replantearse el futuro
Wiernes recuerda lo ocurrido el año pasado: Spotify formaba parte del mercado y ofrecía herramientas para producir podcasts, monetizar y construir comunidad. Pero la mayoría seguía apostando por sentarse solo con los grandes players tradicionales.
Para él, esta actitud demuestra que buena parte de la industria sigue mirando hacia el pasado.
Mientras tanto, el contenido vertical continúa expandiéndose. Para Wiernes, la conclusión es:
“Entender a la comunidad es clave para mantenerse relevante dentro del mercado”.
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