El operador apunta las inversiones principalmente a brindar variedad de productos y una integralidad para el cliente. “Hemos tratado de profundizar el servicios al cliente, al ofrecerles canales HD y luego una plataforma Play con la posibilidad de portabilidad. También hicimos un acuerdo con una nueva compañía de telefonía celular de Bogotá, Bantel, y tenemos ahora una SIM Card para ofrecer un complemento a los abonados”, señala Henry Reyes, presidente de HV Televisión, quien además resalta como positivo mantener y continuar con la dinámica de ofrecer un poco más de variedad en productos.
Por otra parte, el directivo del cableoperador indicó que se logró el proceso de integración de los activos de Cable Bello a HV Televisión, tras un acuerdo entre socios donde las licencias quedaron separadas. “Los activos y los suscriptores del antiguo Cable Bello se integraron a HV Televisión, lo que la convierte en una compañía que esta alrededor de los 110 mil suscriptores entre Bogotá y Medellín y municipios cercanos a estas ciudades”, indica.
Sin embargo, reiteró que el crecimiento ahora es complicado por la devaluación del peso colombiano ante el dólar, “golpeando fuertemente para la adquisición de electrónica y contenido, donde la programación en estos momentos está costando prácticamente el doble por el efecto cambiario”. “Ampliar la red por el momento es complejo, salvo situaciones muy estratégicas de construcciones o actualizaciones”, señala el directivo del operador.
Además acota que “pareciera que la mayoría industria está en un momento de análisis del mercado para ver cómo van las cosas y cómo será la competencia fuerte de los operadores OTT como Netflix, que no tributan impuestos en Colombia; mientras los operadores deben aportar una gran cantidad al Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones del país”.
Exigen reglas claras
Ante la controversia sobre el subreportaje luego de un informe de la Contraloría General de la República (CGR), Reyes comenta que en el país “todavía hay muchos sistemas comunitarios que se manejan de manera bastante informal y usuarios que piratean señales que no están codificadas, por sus altos costos”.
“Existe una competencia desleal con tarifas mínimas que no reporta de manera efectiva la totalidad de suscriptores. Esta competencia con precios irrisorios hacen que el país no se haya tecnificado, codificado, provocando que no haya tanto nivel de control de cajas digitales y codificación lo que lleva a que existan usuarios ilegales”, sostiene.
También luchan por una regulación y para que las nuevas operaciones OTT tengan que pagar lo mismo, independientemente de la tecnología utilizada. “Todos tengamos que aportar en las mismas condiciones”, añade.
Además pretende que haya un reporte único de liquidaciones, vigilancia y control para tener una única ventanilla ya que están reportando a diferentes entes. Y ante el nuevo marco económico, pretenden conseguir contratos de programación en pesos colombianos porque “es muy difícil atinarle a los planes de negocios ante los vaivenes del dólar”.
En el marco que la televisión por cable tiene aún crecimiento y ante las dificultades que significan reemplazar sus anchos de banda, costos, implementación y la presencia de los cableros, la industria aspira a que “la regulación también entienda el papel que tiene la televisión por cable en cuanto a cultura, entretenimiento y un servicio que ha atendido a comunidades alejadas”, concluye Reyes.
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