Daniel Gruener filma ´Top Chef México´ en Quarry Estudios

Su nueva temporada- la segunda- se va a estrenar a principios de 2017, “se trata de un show muy padre y complejo porque viajamos por la República Mexicana. Tratamos de contar la historias de quiénes somos, nuestras tradiciones, cultura, por qué y comemos lo que comemos. La gastronomía es parte del alma de los mexicanos, es fundamental”.

 

Gruener afirma que una de las diferencias grandes con el programa es que la mayoría de los que lo producen y realizan son gente de cine. La técnica como la tecnología es distinta. “Cosas que no se habían hecho en México antes, en términos tecnológicos ya los incorporamos al show. Además, nos gusta viajar y contar historias. El show es muy cinematográfico, intentamos que sea muy emocionante, tiene un ritmo trepidante. 

 

“Básicamente la gente más importante del medio gastronómico mexicano participa aquí y eso nos da más interés, los que estamos filmando nos damos cuenta que ellos tienen grandes historias personales que contar, las razones por las que han decidido dedicarse a ello a la gastronomía”.

 

El cineasta destaca que estos participantes de Top Chef México, están trasformando la gran tradición culinaria de México en nuevas propuestas, ya que fuera de México se está empezando a ver una reacción muy importante, “están los ojos puestos en estos chefs que están haciendo cosas geniales a partir de la tradición de la cocina mexicana”. 

 

Se trata de 13 episodios de una hora que se estrenarán los domingos en la noche, en la primera temporada el público respondió muy bien y por ello, se lanzan ahora en esta segunda etapa y en espera de que sean más.

 

Visitan playas, ruinas, pueblos, mercados, el show da la oportunidad de mostrar muchas facetas de México y tiene muchas regiones, “una sola temporada no bastaría para recorrer, y es que de dónde no hay nada surge un plato rico y hermoso. Eso atrae a mucho público”. 

 

“Contamos historias y en el caso de Top Chef, son historias reales, es un documental, todo es verdad. La gente agradece mucho el poder seguir una historia que no sean nada más pretextos, sino que haya algo más de fondo que puedas hilar, que te emocione y te sorprenda. Trasmitir las emociones es la parte complicada porque no es tan fácil. Esa es toda la artesanía que pertenece al mundo del cine y a eso nos dedicamos: contar una historia de la mejor manera que la gente se emocione al máximo”.

 

La serie es realizada con entre 10 y 12 cámaras que trabajan simultáneamente en diversos espacios. Donde no hay ningún cable no hay nada que detenga al fotógrafo de seguir a un personaje a donde quiera que vaya, mismos que son todos de cine, por lo que tienen la libertad de moverse y eso normalmente, en un set no sucede, y tampoco sucede que trabajen tantas cámaras simultáneamente. 

 

También trabajan con drenes y cámaras que vuelan, cámaras que están en piso “y es una gran coreografía, toda es manejada a control remoto porque no hay nadie, solo los protagonistas que están ahí, porque todo es real, todo es verdad, nosotros dejamos a los chefs solos, intentamos retratarlos de la mejor manera y de los máximos ángulos para eso usamos tecnología que permite esa libertad y que no se había filmado en México antes”, asegura Gruener. 

 

Esto hace diferente al show ya que además de esto, las cámaras tienen la libertad para desplazarse y para poder entrar y salir de lugares, subir y bajar o seguir a la acción a dónde necesiten. Todo funciona sin cables, sin tripies, no hay nada, para los chefs es algo muy cómodo ya que nada les estorba ni altera. Sin embargo, para los que están filmando es muy complejo, “hacer una cobertura de una acción con tanta libertad quiere decir que la luz y los ángulos de cámara tienen que estar bien siempre. Es lograr esa coreografía con algo que no sabes qué va a suceder. Los chefs, no sabes si se van a mover a la derecha o la izquierda o si van a ir para arriba o para abajo. No hay un guión estructurado tampoco”. 

 

Así es que se trata de toda una estrategia para poder capturar un momento verdadero. Top Chef México tiene eso y la capacidad de sus realizadores en capturar esa verdad que finalmente va a ver la gente.

 

Para el cineasta mexicano es su primera incursión en dirigir un programa para TV, donde cada chef tiene sus propias características. Cada uno le brinda al show su propia personalidad, “cocinan y viven la experiencia a partir de quienes, cada uno pertenece a regiones distintas, hay muchos buenos chefs en este país que también van hacer que nuestra vida sea deliciosa, potencializan los sabores con platillos que sorprenden al paladar. Es toda una aventura y una experiencia nueva. Después del capítulo, la gente opina, las redes sociales empiezan a tener a sus favoritos y es cuando el show comienza a cobrar vida”.

 

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